En ANATUR entendemos el mundo rural como todo lo referente a la vida del campo y sus labores. Por lo tanto cuando hablamos de mundo rural, pensamos en un entorno donde sus habitantes viven básicamente de los recursos naturales. Ese mundo rural cada vez más aislado, más lejano, más abandonado… es aquel en el que actividad principal es la agraria: la agricultura, la ganadería, la silvicultura.
Aunque en la actualidad hay una progresiva industrialización y una mejora de las comunicaciones en zonas tradicionalmente agrarias, el mundo rural es cada vez más similar al ámbito urbano. Pese a ello en ANATUR somos conscientes de que las diferencias sociales y culturales entre campo y ciudad persisten, y casi siempre en detrimento del medio rural, que sigue siendo olvidado por nuestra administración. Y eso que el 80% de la superficie de nuestro país es mundo rural. Un 80% del territorio en el que reside el 20% del total de la población española y que tiene un nivel de rentas que apenas alcanza el 50% de la media europea. Los grandes olvidados, casi forzados por quienes nos gobiernan a abandonar su modo de vida, sus tradiciones, sus recuerdos y sus raíces.
En ANATUR defendemos la importancia del mundo rural y sus costumbres a todos los niveles. Los pueblos de España son nuestros graneros y nuestras granjas. Son quienes producen la base de nuestra alimentación siendo pues fundamentales para el conjunto de la sociedad. Destacamos la importancia del mundo rural a nivel demográfico, ya que la población española no tiene porqué limitarse a vivir en núcleos industriales y urbanos, más aún si entendemos que las ventajas derivadas de una ocupación del territorio son muchas. También queremos resaltar la importante función cultural de nuestros pueblos, aldeas y pedanías, al ser las zonas donde se conservan las tradiciones y culturas más ancestrales y populares; y por supuesto la tan en boga función medioambiental, ya que su actividad principal es responsable del mantenimiento de los paisajes y la biodiversidad de medio natural en España.
Sin embargo, a pesar del valor del mundo rural como vertebrador de nuestro país, los profundos cambios sociales de las últimas décadas han tenido consecuencias dramáticas para nuestros pueblos: ante la falta de oportunidades y de servicios de calidad, se ha producido un continuo y casi irreversible despoblamiento. En España muchas áreas rurales siguen despoblándose hasta el punto de que gran parte de ellas están en riesgo de desaparecer. Y las leyes que nos imponen no ayudan. Por ejemplo, la aprobación en 2004 por parte de la Unión Europea del reglamento referente a las normas higiénico-sanitarias para las producciones agroalimentarias ha lastrado el campo Español. Este reglamento, pensado para controlar a las grandes industrias, conlleva requisitos inasumibles para las pequeñas explotaciones familiares y siguen expulsando a la gente de los pueblos.
Desde ANATUR queremos dar al mundo rural el protagonismo que merece. Tratar de frenar y revertir el abandono del campo español; atraer a jóvenes familias con oportunidades laborales, mejora de servicios y comunicaciones para que los pueblos se vuelvan a llenar de vida. ANATUR ha nacido para defender y dar voz a todos aquellos pueblos y gentes que se han visto abocados al olvido por la desidia de quienes nos gobiernan.